Como preámbulo:
Nunca se trata de no ego, se trata de sublimarlo y superarlo. Se trata de alcanzar la "inteligencia del corazón", como la llamo Schwaller de Lubicz, abrir el corazón y acceder a su raíz donde nos conectamos con otra conciencia y otra inteligencia y luego unirla en un todo con la de la cabeza. Pero nuestros corazones se han vuelto en muchos alocados y en otros de piedra. Así, no pueden acceder a esa raíz. Por eso Gurdjieff, nos plantea como trabajo, "el recuerdo de si". Castaneda nos muestra para superar eso que ante todo debemos superar el miedo y luego la importancia personal. Muy lejos se encuentran ellos de conceptos filosóficos monistas y advaitas. Por el contrario a través de verdadera tradición nos proponen el trabajo pragmático para lograr alcanzar ese nivel de conciencia que nos permite luego conectarnos con el Espíritu. Debo nombrar también a Isha Schwaller de Lubicz quien manejo la forma de Schwaller y la de Gurdjieff, logrando avances complementarios muy importantes. Y a Simone Weill que nos abre desde el mismo camino a la mística.
Esto que comentaba es la tradición occidental, que si me permiten sin verme como herético, remonta a dos cedes principales Teotihuacan en América y Egipto en África. Algo que pude ver entre lineas leyendo a Fulcanelli, que fue mucho mejor acechador que Castaneda, (no ha podido descifrarse de quien se trato este adepto). Y digo adepto, porque tal termino tradicionalmente aplica a quien ha realizado la gran obra, no vulgarmente como lo aplica el pseudo-esoterismo new age. Hay que buscar el origen común tolteca y egipcio en la tradición atlante tal como la refiere Rene Guenon y Rudof Steiner, principalmente Édouard Schuré, ("Evolución Planetaria y Origen del Hombre", que pese a tener errores de la teosofía de Blavastky aporta algunas cosas de real interés). Las concepciones de estos pueblos se barajaban en un paradigma muy diferente al nuestro. No por nada ambas culturas se encuentran a la misma altura en tanto a paralelos terrestres. Eso es porque aprovechaban la entrada de los rayos solares como poder, traducidos en Teotihuacan como magia y en Egipto magia y al-chemia. Solo los iniciados saben que la forma en que entran los rayos solares a esa altura pueden condensarse y capitalizarse como energía. Esto es aplicable también al sur de España, Marruecos, etc. Recordemos que Al Andaluz fue también una cultura avanzada y esotérica. El legado de tal iniciación quedo un tiempo entre los constructores de catedrales, y se perdió con la modernidad, la masonería y el materialismo.
Tradición:
Ya Gurdjieff nos insinuó lo basto de la cultura egipcia y hasta nos hablo del mapa "antes de las arenas", lo cual habla de una civilización que se extendía por el Sahara que fue devastada por un cataclismo y la hundió bajo las arenas, fiel testimonio de eso es la esfinge de Giza. Luego otro genio, Schwaller de Lubicz, nos enseña el esoterismo egipcio que es el mismo de la tradición occidental. Hay que valorar que ha descifrado los jeroglíficos, monumentos y templos en varios niveles, que superan enormemente la comprensión que tienen los arqueólogos de tal cultura. La corriente sufi es una parte de la tradición egipcia que quedo. También quedo entre los cristianos coptos, ambos perseguidos en Egipto por los fundamentalístas musulmanes. Fue Fulcanelli el tercer genio que nos revela otra parte de la antigua cultura egipcia que es la alquimia. Hay muchas referencias a eso tanto en "El Misterio de las Catedrales" como en las "Moradas Filosofales". Nos da la pista de como en América y Egipto, se ablandaba la piedra y hasta se usaba arena como cemento, formulas que ya han sido reconstruidas y nos muestran como los bloques de las pirámides se armaban con cajas de arena y como en lugares como Sacsayhuamán (Cuzco) se moldeaban las juntas de los megalitos. Solo se tallaba y ablandaban en Egipto en una sola pieza los obeliscos y esto era por su carácter sagrado.
Alquimia:
Para ir cerrando con el tema, vamos a la función mágica - alquímica que presentan los obeliscos del antiguo Egipto. El obelisco solitario, representa lo que en la kabbalah se denomina "el pilar del medio". Este es un rayo del Sol detrás del Sol, o sea del Sol Espiritual. Es de uso ceremonial, y de ningún modo es símbolo fálico, ya que el símbolo fálico esta representado en el miembro de Osiris. Entonces el obelisco es un derrame de la gracia, el descenso seminal de Espíritu que fecunda el alma. Es una sublimación del concepto del menhir que se emplaza en lugar de poder y lugar ceremonial, como pararrayos de la fuerza superior o aguja de acupuntura cosmotelúrica, para canalizar la fuerza que fecunda la tierra y los cultivos. Es también el Axis mundi. Mientras que los obeliscos duales, son las columna del rigor y la de la misericordia en el Árbol de la Vida. Lo Masculino y lo Femenino. En alquimia Marte y Venus, o la Luna y el Sol como refiere la "Tabula Smaradigna". A nosotros nos interesa como función polar. Y como hablamos de rayo, comprendamos que la alquimia egipcia trabajaba de forma mas simple que la posterior alquimia metálica. O sea iba a principios mas directos como el agua, el aire, el sol...
El Sol Espiritual, es fuente de vida del alma. El Sol natural es fuente de la vida natural. He escrito varias veces sobre que la Gran Obra se realiza condensando luz. Así como juntamos agua de lluvia, deshielo o rocío. Hemos de saber atraer luz solar, pero para eso es necesario conocer su imán, pues los influjos siempre van a su opuesto.
Los egipcios mantenían en secreto el vidrio porque con el componían un balón esférico a ser fecundado por el sol de esa zona, igual que México, que permite condensar el rayo solar, sea sal, en liquido o en aceite, esto varia acorde al lugar geográfico del mundo.
Nos queda entonces el imán, si somos perspicaces veremos a los obeliscos dobles como los dos principios duales. Haciendo cabala hermética, esos principios duales son el Sol y la Luna, esto nos dice que el imán solar es la Luna. Lo cual nos sugiere llenar aire de Luna en balón de cristal, cerrarlo herméticamente y exponerlo a la Luna. Mas tarde sera expuesto al Sol. Recordemos que la medicina hermética se ejercía en los templos egipcios por sacerdotes y sacerdotisas iniciados.
Cabria hablar sobre médicos alquimistas entre 1500 y 1700 que curaron a muchas personas en mortales pestes por tales medios que la ciencia actual desconoce, pero es mejor dejar aqui.
Existe también la técnica del balón cerrado al vacío. No quiero dar todo tan claro, pues así lo exige la tradición.
A.